sábado, 10 de septiembre de 2011

Leda


Leda, Michael Parkes



Burbujeo muy dulce
                                               somníferos y plumas
di ahora lo que quieras
nadie mira
la noche fue una lenta extracción
un tibio sueño de calcio
abriéndote los huesos

¿puedes escuchar el rumor
de alas en la almohada
                                               húmeda?

***

este cuerpo inane
este lago de cal huérfana

***

Estoy sola
el amanecer
una pastilla blanca
anoche soñé con un tigre albino
crepitaban ortigas en sus ojos
no
estoy sola la lengua me sabe a
nieve y a lejía
pero mis labios aún rígidos de hastío
abro los ojos
anoche

Ahora sobre los muebles polvorientos
sólo yacen frutas silenciosas
se pudren tiernamente
sin una gota de sangre sólo el velo de la luz
y sus encajes rotos

Amanece la hora almidonada y
                                                               mis dientes
fríos duros antiguos
he vivido siempre en un jardín de anémonas
cada una de mis noches poblándose
                                                               de globos blancos.

 ***

Pero ayer
al romperse el aire rojo de la tarde
vi pasar un cisne
su esbelto cuello anunciaba
el aliento de la aurora

De repente entre mis piernas
despertó
una planta de azúcar


pálidas resinas envenenan mis horas.


3 comentarios:

  1. :D :D :D gracias! (decirte que es mutuo sonaría demasiado fácil, pero es sincero)

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  2. No recordaba dónde te había visto antes. Creo que en el blog de Gio, que sueles frecuentar.

    Tienes imágenes de una gran sensibilidad, muy delicadas, que casi se pueden masticar. Tienes una mirada interior finísima.
    Es un poema muy bello también. Me encanta.

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